Las vallas para parques infantiles se instalan normalmente en jardines públicos donde existen zonas de juegos, para reducir los riesgos de los niños. La valla en los parques infantiles evita que los pequeños salgan a la zona de juego de los mayores o a zonas con tráfico, facilitando la vigilancia por parte de sus padres, y también reduce la posibilidad de acceso de mascotas.

Para cumplir adecuadamente su función, se debe garantizar que las vallas infantiles disponen de todos los requisitos de seguridad, tanto en sus características como en su instalación, porque si no se puede convertir en un elemento de riesgo.

En Urbadep hemos apostado por hacer de las vallas un elemento activo en la seguridad de los parques infantiles, con una gama homologada que cumple la normativa vigente, tanto a nivel europeo como estatal y local.

Están realizadas en acero galvanizado pintado al horno, un material que ha quitado todo el protagonismo a la madera por ser de carácter antivandálico, tener mayor durabilidad y escaso mantenimiento. Además, permiten colores vistosos y un diseño más atractivo.

Tienen todas las premisas de seguridad necesarias para una valla de parque infantil, que pueden resumirse en:

  • Altura mínima de 80 cm a nivel del suelo
  • Espaciado máximo entre elementos de 10cm.
  • Ausencia de elementos que sobresalgan.
  • Evitar formas que puedan causar atrapamiento.
  • Cantos y aristas suaves.
  • Puertas de madera de acceso con cerradura.
  • Elementos metálicos sin aristas.

Otro aspecto importante a tener en cuenta para la seguridad es incluir en su interior mobiliario urbano, -bancos, papeleras, ceniceros, etc.- para facilitar a los mayores el cuidado de los niños y la participación de éstos en los juegos, y también para evitar un cierto efecto de jaula. Situar los bancos fuera de la valla del parque infantil causa la continua apertura de la puerta dificultando la vigilancia.

Por último, se debe garantizar que el montaje del vallado infantil se realiza adecuadamente, según la superficie donde se instale:

  • En tierra o arena, mediante el empotramiento del pilar en zuncho de hormigón de 250 x 250 x 200.
  • En solera de hormigón, mediante placas de anclaje con taladros.

Los fabricantes de parques infantiles así como los proyectistas han de evitar el montaje de vallados de parques de juegos que no cumplan las anteriores precauciones, especificando correctamente los requisitos exigibles para evitar el suministro de material que pueda causar daños o que deba de retirarse de la obra tras una primera inspección.